Se trata de una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti y, como no existen vacunas que lo prevengan ni medicamentos que lo curen, se deben tomar ciertos recaudos.

En épocas en que las temperaturas suelen ser elevadas y la presencia de mosquitos es usual, surge una preocupación denominada “dengue”. De acuerdo al Ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación, se trata de una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes aegypti. Cuando el mosquito se alimenta con sangre de una persona enferma de dengue y luego pica a otras personas les transmite esta enfermedad. El contagio solo se produce por la picadura de los mosquitos infectados, nunca de una persona a otra, ni a través de objetos o de la leche materna.
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas son: 1) fiebre acompañada de dolor detrás de los ojos, de cabeza, muscular y de articulaciones; 2) nauseas y vómitos; 3) cansancio intenso; 4) aparición de manchas en la piel; 5) picazón y/o sangrado de nariz y encías. Ante estos síntomas se debe acudir al médico para recibir el tratamiento adecuado.
¿Cómo puede prevenirse?
Como no existen vacunas que prevengan el dengue ni medicamentos que lo curen, la medida más importante de prevención es la eliminación de todos los criaderos de mosquitos, es decir, de todos los recipientes que contienen agua tanto en el interior de las casas como en sus alrededores.
* Eliminar todos los recipientes en desuso que puedan acumular agua.
* Dar vuelta los objetos que se encuentran en el exterior y pueden acumular agua cuando llueve.
* Cambiar el agua de bebederos de animales, colectores de desagües de aire acondicionado o lluvia, dentro y fuera de la casa, cada 3 días.
* Rellenar los floreros y portamacetas con arena húmeda.
* Mantener los patios limpios y ordenados y los jardines desmalezados.
* Limpiar canaletas y desagües de lluvia de los techos.
También es importante prevenir la picadura del mosquito:
1) usando repelentes;
2) utilizando ropa clara que cubra los brazos y las piernas;
3) colocando mosquiteros en puertas y ventanas;
4) utilizando repelentes ambientales como tabletas y espirales.
Fuente: Ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación.
Marzo 2019 | Edición #72